Psicomotricidad

La Psicomotricidad integra las interacciones cognitivas, emocionales, simbólicas y sensoriomotrices en la capacidad de ser y de expresarse en un contexto psicosocial.

La psicomotricidad, así definida, desempeña un papel fundamental en el desarrollo armónico de la personalidad y la creatividad, promoviendo en la persona el conocimiento del propio cuerpo y su proceso comunicativo. Se trabaja con el cuerpo, generando situaciones lúdicas, expresivas y creativas, dando primacía a la seguridad y a la relación vincular.

La intervención psicomotriz se adapta a las necesidades de madurez y desarrollo de cada persona y estimula o rehabilita, de acuerdo a un orden jerarquizado, diversos procesos de desarrollo como son los procesos tónico posturales y de equilibrio, la adquisición del esquema corporal, los procesos de estructuración espacio-temporal y de lateralización, estructuración rítmica y coordinación, entre otros.