ESTIMULACIÓN TEMPRANA Y ESDM
Somos profesionales con amplia formación en intervención temprana desde un enfoque conductual, naturalista basado en los hitos del desarrollo. Tenemos formación avanzada en ESDM (no certificados).
El término estimulación implica lograr en el niño pequeño, potenciar su desarrollo a través de la recepción de los estímulos facilitados por un terapeuta y adulto significativo, con el fin de compensar las dificultades presentadas por distintos motivos. En los primeros años de vida el fenómeno de la plasticidad neuronal, permite que el cerebro pueda establecer múltiples conexiones, con el fin de compensar lo déficit. La estimulación implica un cerebro en desarrollo, y es por esto que abarca la edad temprana y primera infancia, y la diferenciamos del término REHABILITACIÓN que implica un daño cerebral y un cerebro ya desarrollado.
La estimulación temprana considera múltiples acciones que favorecen al desarrollo del ser humano en sus primeros años, entre los que tenemos principalmente la recepción de diferentes estímulos que desarrollan nuestros sentidos. Los estímulos son aquellas señales que producen en el ser humano una influencia sobre alguna función. Se trabaja desde un enfoque neuropsicológico, relacionando la conducta con las funciones o disfunciones cerebrales (Sistema Nervioso Central) que subyacen a la misma, teniendo en cuenta a la familia del paciente, promoviendo el vínculo y las relaciones padres – hijo.
ESDM: Modelo Denver de Comienzo Temprano en Trastornos del Desarrollo
Es un método de Evaluación e Intervención Temprana para niños con TEA o con riesgo de tener el trastorno. Parte del conocimiento acerca del desarrollo típico para favorecer una trayectoria de desarrollo similar en niños con riesgo de TEA. El modelo apunta a desarrollar la iniciativa (espontaneidad) y la capacidad para aproximarse e interactuar con otros, y proporciona un «andamio» sobre el que construir el desarrollo a partir de los intereses y tendencias del propio niño.
Es una terapia de intervención temprana intensiva que se realiza en el ambiente natural del niño, que es eficaz para mejorar la percepción y las habilidades del lenguaje entre niños muy pequeños con autismo o riesgo de tener el trastorno, también normaliza su actividad cerebral y mejora sus habilidades sociales.
La terapia combina los métodos de enseñanza intensiva de Análisis del Comportamiento Aplicado (ABA) sobre el comportamiento con planteamientos del desarrollo 'basados en la relación'.
